Durante este jueves, Forbes Chile publicó una lista titulada «Las 30 mujeres poderosas de Chile este 2022«, un artículo enfocado a reconocer a las personas más destacadas en el país en sus «ámbitos profesionales» y también ser una fuente de inspiración para varias generaciones, objetivo que no ha dejado a todos satisfechos.
Mientras que en el artículo figuran personas como Michelle Bachelet (expresidenta de Chile), Daniela Vega (actriz) y Mon Laferte (Cantante), el equipo de Forbes sorprendió la atención de todos al incluir a Ignacia Antonia, una influencer conocida en TikTok.
Según el artículo, la creadora de contenido fue elegida por contar con más de «40 millones de usuarios entre TikTok, Instagram y YouTube», además de ser empresaria, con su línea de maquillaje junto a la marca Etienne, cuatro libros publicados, su reciente debut en el mundo del cine con la película Chilena «Un Like de Navidad» y su propia agencia para promocionar a otras influencers y cantantes.
Un WTF del mismo público chileno
Pese a que la idea era destacar a mujeres quienes se encuentran sobresaliendo en todos los ámbitos, la recepción de la gente al ver a esta influencer ha dejado una repetida pregunta: «¿Quién?«. Pese a tener más de 40 millones de seguidores entre todas sus redes, su rechazo se hizo notar en los portales en donde se habla de su aparición en Forbes.
A eso se le suma el odio a la palabra «influencer», viéndolo algo totalmente negativo, sobre todo asociándolo a temas de «poder».
La situación también ha generado memes por parte de Fanpages chilenas, burlándose del «poder» que tiene como influencer.
Cabe destacar que el contenido de la creadora de 21 años está mayoritariamente centrado en jóvenes menores de edad y de todas partes de Latinoamérica, por lo que no es extraña la reacción de los mismos internautas chilenos.
Debido a lo anterior, su popularidad está solo centrada en su público (como la mayoría de los influencers), por lo que no sería novedad si alguien la desconociera fuera de ese círculo. Si bien, cumple como «mujer destacada», el caso ha vuelto mostrar que los influencers no tienen «poder» fuera de su círculo y que el mismo público chileno no piensa cambiar esa mentalidad.
