Nintendo anunció este viernes que las preventas de su nueva consola Switch 2 serán retrasadas indefinidamente en Estados Unidos. Revelado mediante un comunicado de Gamestop, este cambio se debe a las nuevas políticas de tarifas anunciadas por el presidente Donald Trump, que serán aplicadas desde este sábado 5 de abril en dicho país.
Los motivos detrás de esto son la evaluación respecto al posible impacto de los aranceles y la evolución del mercado. Aclaran que la fecha de lanzamiento de la consola no cambiará y que actualizarán con más información en cuanto esté disponible.
Originalmente, las reservas en estados Unidos tenían fecha 9 de abril, mientras que en países de América Latina no existía un día en concreto. Por otro lado, los valores oficiales presentados el pasado jueves son $450 USD consola base y $500 USD en un Bundle con Mario Kart World, lo que podría aumentar dentro de estos días.
Tomando en cuenta que Nintendo of America, con sede EEUU, es quien ve la logística, el aumento también podría ser inevitable para LATAM. Las nuevas políticas de Trump comprenden un aumento de aranceles a ciertos países, aumentando entre un 20% a 40% en China (34%), Vietnam (46%) y Japón (24%). Incluso Chile también tendrá un aumento del 10%.
Por ahora, la única fe es la posibilidad de que algún país de fabricación logre reducir los aranceles a 0%, siendo Vietnam una alternativa en negociaciones. Vietnam actualmente cuenta con una parte de la fabricación de Nintendo Switch que era originalmente de China, por lo que podría hacer ser un movimiento inteligente para conservar el precio.
ESA se pronuncia ante la posible subida de Switch 2
Anteriormente, Entertainment Software Association (ESA) había iniciado una campaña para concientizar el daño de estos aranceles a la industria de los videojuegos. Ahora la entidad mencionó, bajo una entrevista con Game File, que los hardwares se verán afectados en múltiples frentes. “Cualquier producto que compre un consumidor probablemente estará sujeto a muchos de los aranceles anunciados, todos ellos acumulados uno sobre otro”, mencionóAubrey Quinn, vicepresidente senior de ESA.
Sin embargo, indican también que están optimistas. Piensan que “habrá una solución que no dañe a las industrias estadounidenses, incluida la de videojuegos y que no perjudique a los consumidores estadounidenses”.