Con todo lo que está pasando en Estados Unidos, es normal ver como información sensible de personas importantes está siendo filtrada en internet, la cual comúnmente ayuda a otras personas a encontrar más cosas relacionadas. Entre estos datos, filtraron los datos de la tarjeta de crédito del presidente norteamericano Donald Trump (el cual es reconocido por tener una fortuna de más de 3,525 millones de dólares) y de Jair Messias Bolsonaro, actual presidente de Brasil.
Lamentablemente, en el ciberespacio la gente no suele ser muy amable con estos datos, por lo que a la hora de su filtración, una gran cantidad de comunidades y personas no solo compartieron los datos, sino que también llamaban a usarlos para compras personales.
Lo que la gente no contaba, es que este es un delito informático conocido como carding, el cual consiste en el uso de una tarjeta de crédito de un tercero para una compra fraude en algún comercio electrónico, poniendo una dirección propia o conocida. Según el monto y uso, las penas pueden ir desde una multa hasta años de cárcel.
Si bien, este tipo de acciones se encuentran en conocimiento de retail, muchas de ellas han optado por cancelar las ordenes con las tarjetas o mandar un aviso interno a la cuenta donde fue usada. Según fuentes cercanas, el procedimiento judicial existe, el cual se ha visto ralentizado por la gran cantidad de personas involucradas.
¿Cómo es el procedimiento oficial?
Respecto al tema judicial, el procedimiento de la PDI es rastrear a las personas que hicieron las compras mediante su IP y llevarlas a la justicia, dándoles cargos por estafa y además se les multa con monto de lo comprado. Las personas que hayan compartido las tarjetas por redes sociales pueden caer con el cargo de cómplices, teniendo que compensar también los daños en caso de que sean las fuentes directas de la estafa.
Corrección: 08 de mayo, 2020
Una anterior versión de la nota contaba con una imagen de un correo de Falabella notificando tomar acciones en contra de una de las personas que usó estas tarjetas. Esta imagen ha sido eliminada al no poder comprobar su veracidad.
Sin embargo, fuentes cercanas indican que sí existe procedimiento por carding, mermado por la gran cantidad de personas involucradas. Cabe recordar que usar tarjetas de crédito que no son propias es fraude ante la ley.
