Como típico chileno y con el conocimiento de que el lunes pasado se lanzaba la expansión de World of Warcraft, el domingo a última hora recién estaba comprando Battle for Azeroth, más que nada para no tener que comprarlo el lunes en el PC del trabajo.

Como la mayoría de los jugadores que aún se emocionan con cada expansión, estaba con un ataque de ansiedad, pedí salir temprano el lunes sin ninguna excusa aparente y solo dije que necesitaba ir a hacer un trámite personal. Obviamente, World of Warcraft es mucho más que un trámite.

Llegue a mi casa tipo 20:00 horas, ya que, había pasado al súper a comprar un poco de reservas para que me duraran hasta el miércoles. Luego me instale en mi PC y estaba dispuesto a esperar lo que sucede cada vez que sale una expansión, una eterna lista de espera para poder logear en el WoW… Pero me encontré con una sorpresa, no había filas de espera para entrar y ya dentro del juego no tenía siquiera lag, estaba listo para volver a mis aventuras dentro de Azeroth.


La elección de un personaje

Ya llevaba casi toda la semana pensando con que personaje iba a jugar, ya que, en la expansión anterior, Legion, había subido varios personajes de nivel solo por ir probando y por razones de ocio, a veces leveleo desde cero con amigos solo para pasar el rato.

Tomé la decisión más sencilla, mi cazadora de la Horda, que de alguna forma sería más cómodo para leveliar, pues no tendría que tener a los enemigos encima mio y mis mascotas la podían hacer de tanque, donde también pueden hacer de healer si es necesario, ¡Esos sí son bestias espíritus!

Al entrar, me dieron la típica subida de personaje que dan con cada expansión, la cual tengo pensado guardar hasta que pueda conseguir (y que Blizzard la inserte para ser jugables) mi Troll Zandalari por el cual espero que no tenga que esperar un año para obtenerlo.


Comenzando la aventura

En verdad, quiero evitar spoilers del lore, pero a veces es difícil no hacerlo, más que nada cuando empecé a hacer algunas quest de inicio de expansión. Como ya es típico, terminamos cerrando la historia de Legion, donde Sargeras había enterrado su espada para intentar matar Azeroth de una vez, y como algunos ya sabían, con estás quest obtenemos el Corazón de Azeroth.

También es típico una gesta para seguir introducirnos a la nueva expansión, en este caso nos tocó ir a Stormwind a rescatar nuestro contacto que nos llevara al nuevo continente de Zandalar.

Ya en la isla de Zandalari llegamos Zuldazar, la que será nuestra ciudad principal si eres Horda. Aún no se está claro si se más adelante se cambiara a otra ciudad neutral como sucedía con Dalaran, cosa que se duda, pues estamos en una guerra constante y más que remarcada contra la alianza en esta expansión.

Zuldazar es bastante grande, más de lo que ya estamos acostumbrados, y dentro de esta ciudad tan extensa tenemos que movernos incluso entre dos puntos de vuelo que nos llevan de un extremo al otro. En lo personal y a modo de consejo, lo mejor es ir directo a la zona de profesiones para empezar a subirlas a medida que leveleamos por la isla, cosa de que, en el caso de mi cazadora, tengo minería e ingeniería goblin.

Zuldazar ya tiene más que marcada la temática troll que hemos visto antes en otras expansiones, solo que está vez llegamos incluso a ver ruinas del imperio en todas las zonas de la isla.


Aventuras en zonas establecidas

Ya con una base establecida dentro de Zuldazar, nos toca elegir una zona donde empezar dentro de Zandalari. En lo personal decidí empezar por Vol´dun, y en ella me encontré con las nuevas razas que iban a llegar con la expansión como Vulpera y los Sethrak.

Algo que encontré destacable la cantidad exuberante de mobs en el mapa, donde su respawn era bastante rápido, lo que no hacía difícil hacer las quest por falta de estos.

Recorriendo Vol´dun y a medida que iba avanzando por el mapa, me encontré con algo que nunca puede faltar en una expansión de WoW, nada más y nada menos que la amada raza de Blizzard, ¡¡Murlocs!! Otra cosa que me gustaría destacar y que no veía desde Warlord of Draenor, los tesoros en lugares complicados, que le dan un sabor extra al juego. Antes, se tenía que buscar arduamente y complicarse en cosas como subir a un árbol y caminar por una cuerda hasta otro árbol para poder saquear los cofres.


Muchas, muchas quest

Dentro de la zona de Vol´dun, me encontré con una cantidad sobresaliente de quest. Tengo la costumbre de tomar cualquier quest que encuentre en el camino, pero solo tomo un hilo de quest a la vez para evitar enredarme en el lore de la zona. Pero si miran la foto, son suficientes para mantenerme ocupado por varias horas.


Ingeniería Globlin de precisión

Ya para dar termino a esto, terminé todas las quest de Vol´dun, hasta las secundarias, luego de eso empecé con la quest principal de la Horda, y como es típico dentro del mundo de WoW probablemente si explota, lo hizo un goblin. La imagen es una referencia a cuando uno empieza a establecer bases en Kul Tiras.


Hasta el momento Battle for Azeroth es una buena expansión, el lore se ha estado expandiendo como debe ser, a medida que avanzamos nos vamos enterando más sobre algunas dudas existenciales respecto a los espíritus troll.

Está mañana llegue hasta nivel 120, y como recomendación no se apuren si quieren apreciar cada quest e historia que esconden las zonas de leveleo.