Este martes se reportó el fallecimiento de Robert Redford, uno de los actores y directores más influyentes de Estados Unidos. El artista de 89 años murió en las montañas de Provo (Utha, Estados Unidos), donde contaba con su residencia.
Su deceso fue confirmado por Cindi Berger, directora ejecutiva de la agencia de publicidad Rogers & Cowan PMK. Mediante un comunicado, reveló que Redford falleció mientras dormía en su domicilio, sin especificar la causa de su muerte.
Charles Robert Redford Jr. es considerado un símbolo del Hollywood clásico, con destacadas participaciones tanto como actor y director, contando también con destacadas participaciones en la última década. Su talento, físico y carisma lo hicieron destacar durante varias décadas como actor, dejando también su huella en el cine independiente como fundador.
Su carrera actoral despegó con películas como Butch Cassidy (1969), donde compartió protagonismo con Paul Newman. Juntos repitieron éxito en El Golpe (1973), que ganó el Oscar a Mejor Película. Otro de sus roles más recordados fue como Bob Woodward en Todos los hombres del presidente (1976), centrada en el escándalo Watergate.
A lo largo de su filmografía también destacan títulos como The Way We Were (1973), El Gran Gatsby (1974), África Mía (1985) y Todo Está Perdido (2013). Incluso formó parte del MCU, interpretando al villano Alexander Pierce en Capitán América y el Soldado del Invierno (2014) y Avengers: Endgame (2019).
Cineasta y Cine independiente
Como director, Redford debutó con Gente Corriente (1980), película ganadora de cuatro Premios Óscar, incluyendo Mejor Película y Mejor Director. Posteriormente, dirigió obras como El Río de la Vida (1992), que lanzó la carrera de Brad Pitt, y Quiz Show: el dilema (1994), consolidando un estilo caracterizado por el drama humano, los dilemas morales y la conexión con la naturaleza.
Adicionalmente, fue considerado un pilar del cine independiente. En 1981 fundó el Sundance Institute y el Festival de Cine de Sundance, que con el tiempo se convirtió en uno de los más importantes del mundo en su categoría. Gracias a este proyecto, impulsó la carrera de directores como Quentin Tarantino, Steven Soderbergh, los hermanos Coen y Darren Aronofsky, transformándose en un referente cultural que dio nuevas oportunidades al cine alternativo.
Su vida también estuvo marcada por el activismo. Fue un defensor del medioambiente, apoyando iniciativas de conservación, energías limpias y la protección de parques naturales. Además, se involucró en causas progresistas, como los derechos civiles y la libertad de expresión artística. En 2016, su aporte a la cultura y la sociedad fue reconocido con la Medalla Presidencial de la Libertad otorgada por Barack Obama.